DOCUMENTOS HISTÓRICOS INÉDITOS 27 / JULIO – SEPTIEMBRE 2019
“Proyecto de Frontón para edificarse en el llamado Parador de San José”
Benito de Castro Rueda, arquitecto / Marcial Muñoz Giraldo, promotor
Medina del Campo, 9 de junio de 1905Tinta sobre papel encerado / 31 x 48 cm
Archivo Municipal de Medina del Campo, AMMC, H 323-5315
Aún permanece en la memoria de los medinenses la existencia de un frontón o “juego de pelota” que fue conocido como “Frontón del Norte” y que estuvo emplazado junto al Parador de San José (Palacio de los Torreblanca), con entrada por la actual calle de San Miguel. Gracias a la documentación y planos conservados en el Archivo Municipal, algunas fotografías históricas y un plano de la población fechado en 1911, podemos recomponer muy bien las características de este espacio de recreo de la Medina de “entresiglos” que llegó hasta las décadas centrales del siglo XX.
Por los documentos oficiales escritos conocemos los nombres de quienes patrocinaron y proyectaron este frontón: el “propietario” Marcial Muñoz Giraldo, fue el promotor de la construcción y quien encargó el proyecto a Benito de Castro Rueda, joven y prestigioso arquitecto, natural de la vecina villa de Serrada, que había obtenido el título en la Escuela Superior de Arquitectura de Madrid el 30 de junio de 1902, con 26 años de edad. Un año más tarde, el 28 de noviembre de 1903, es nombrado “Director de las obras municipales” de Medina del Campo, estando a su cargo la supervisión de las construcciones públicas y privadas de la localidad (AMMC, D, Caja 357-4460). Junto con este frontón de 1905, sabemos que construyó varios edificios de viviendas en la Plaza Mayor: En el año 1904 firma los planos de la casa nº 6 de la acera del Potrillo, con esquina a la calle del Almirante; en mayo de 1907, dirige la construcción del edificio enclavado en el segundo tramo de la acera del Peso, esquina con la calle de Maldonado; en 1910, otra vivienda en la acera de la Joyería, con esquina a la calle del Almirante (enfrente de la que había levantado seis años atrás); y en 1915 un nuevo edificio en el tramo central de la acera de la Joyería. En todos ellos, Benito de Castro plantea diseños de corte historicista, mostrando resonancias eclécticas al utilizar en sus fachadas elementos acastillados en los remates superiores de los vanos, huecos muy alargados de diferentes dimensiones y arcos simples o pareados de cerramiento superior en resalte, logrado por aproximación de hiladas; en definitiva, edificios con fachadas de gran calidad compositiva al utilizar sabiamente las modulaciones, ritmos y elementos ornamentales de guarnición, con el uso exclusivo el ladrillo prensado y el hierro como elementos de construcción.
Respecto a la construcción que ahora nos ocupa, leemos en la memoria presentada al Ayuntamiento que “el frontón destinado a juego de pelota, dentro de la cerca del edificio llamado Parador de San José” era una construcción de ladrillo y adobe de gran simplicidad, con una “faja de oriente a poniente de doce metros de ancha, teniendo por longitud la del solar, que en su línea media mide treinta y cinco metros”, con la pared del frontón situada al extremo del poniente, de doce metros de altura, y dotada de los estribos o contrafuertes necesarios para su perfecta estabilidad; a su izquierda se construye una pared lateral “como es costumbre en casi todos estos edificios” (parte de ella puede verse en la fotografía aérea de 1959) y frente a ella una sencilla tribuna de estructura de madera destinada al público, que aparece en varias fotografías de la época. Por este espacio “deportivo” y de recreo, pasaron grandes jugadores de pelota de fama nacional, según la prensa de la época, destacando siempre los de ascendencia vasca
Antonio Sánchez del Barrio